sábado, mayo 31, 2008

Vuelta a los clásicos

Ya está hecho. Los Celtics consiguieron su pase a la final de la NBA, una serie que no disputaban desde el 87. Vuelven tras 21 años de ausencia y acceden a la final de la misma manera que lo hicieron en el 87: eliminando a los Detroit Pistons (4-3). El regreso también coincide con el oponente: Los Angeles Lakers, el otro gran clásico. Ambos llegan a la NBA habiendo apartado a los dos equipos más duros de la competición. Pero mientras para unos formaba parte del guión (Boston era favorito desde la formación del Big Three), los otros no contaban en ninguna quiniela. La llegada de Gasol y la mejoría de Bryant han permidido que las jovenes generaciones de aficionados disfruten con el clásico de los clásicos. Será a partir del 5 de junio.

Boston 89, Pistons 81 (4-2)

Maldito último cuarto
Esto deben estar pensando los jugadores de los Pistons. Tras ceder en el primer periodo, los locales fueron recuperando la desventaja inicial para acabar mandando de 10 en el cuarto periodo. Pero surgió la figura de Paul Pierce, anotando 12 de sus 27 ptos en este cuarto. Al mismo tiempo desaparecía gente como Rasheed Wallace, héroe y villano a partes iguales. Si el conflictivo ala-pívot fue clave en el título del 2004, en esta temporada ha sido todo lo contrario. En el partido de ayer falló los seis triples que intentó y anotó sólo 4 ptos, aunque capturó 10 rebs. Flojas series también las de Tayshaun Prince, quien anotó 10 ptos para un promedio de 9 en estas series, lejos de los 16 y 15 pp ante Sixers y Magic, respectivamente. Los que sí dieron el cayo fueron Chauncey Billups (29 ptos, 6 asist) y Richard Hamilton (21). Este último ha sido el mejor jugdor de los Pistons, con una media de 21 ptos en los playoffs.

Por los Celtics volvió a "rular" el Big Three. A la gran actuación de Pierce (quien también fue el máximo reboteador de su equipo con 8 rebs) hay que unir los 17 ptos de Ray Allen y los 16 ptos, 6 rebs y 4 asist de Kevin Garnett. El ala pívot no desbordó con sus números pero cuajó una gran actuación en todos las facetas del juego.

El quinteto de los Celtics llegá con mucha hambre a la final ya que ninguno tiene un anillo de campeón ni ha disputado ninguna final. Tan sólo dos jugadores en los Celtics tienen la suerte de poseer un anillo. El base reserva Sam Cassell ganó dos anillos con los Houston Rockets en sus dos primeros años como profesional (93-94 y 94-95) y el alero James Posey consiguió la gloria con los Miami Heat en el 2005-2006.


2 comentarios:

drazgon dijo...

La final que todos esperábamos!!
La nostalgía nos invadirá por completo recordando aquellos duelos de los 80.
Esperemos que el nivel de juego se acerque, aunque solo sea un poquito, a como jugaban los Lakers y Celtics de los 80.
Gracias por el link.
Incluyo el tuyo en baloncestistas.

JR Sanchis dijo...

Así es. Espero que esté a la altura de las grandes finales y no vivamos lo que en el soporífero spurs-cavs del año pasado.
Saludos y gracias por tu comment.